lunes, 29 de septiembre de 2008


Como si película de Mario Almada se tratara (con el perdón de don Almada, claro), el jueves detuvieron en Apatzingán, Michoacán, a tres presuntos autores materiales del atentado que el pasado 15 de septiembre dejó ocho muertos y 132 heridos en la capital michoacana.

En una espectacular conferencia de prensa a las que no tiene acostumbrados el gobierno, cada que agarra a “peces gordos”, la titular de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la PGR, Maricela Morales, informó que se trata de Juan Carlos Castro Galeana, Alfredo Rosas Elisea y Julio César Mondragón Mendoza, quienes –dijo– confesaron que son los responsables materiales de los ataques con granadas; así de rápido y simple.
“Declararon ante esta autoridad federal haber sido quienes detonaron granadas de fragmentación contra las personas reunidas a causa de los festejos”, precisó Morales.

Y no sólo eso, los detenidos también aseguraron que pertenecen al grupo de Los Zetas, brazo armado del cártel del Golfo, y que se dedicaban a la delincuencia de tiempo atrás en Michoacán.
Por si lo anterior no fuera suficiente para mandar este librero directo a la basura, la funcionaria contó cómo se logró la detención: “el 24 de septiembre se recibió una denuncia anónima en la SIEDO, la cual dijo que tenía conocimiento de que las personas que ejecutaron la acción delictiva en Morelia estaban ubicados en un domicilio en Apatzingán”.

Mira qué fácil. Una denuncia anónima, van a la casa, los capturan sin un disparo y se confesaron culpables así no más (bueno, se ve que antes los madrearon bien y bonito).

A poco el pinche gobierno pensará que vamos a creer esta chafísima historia, si a leguas se ve que son chivos expiatorios. Porque de otro modo no veo porqué estos Zetas andaban en territorio de La Familia; ni tampoco se justifica la evidente madriza que les metieron (total, ya habían confesado). Asimismo, con este cuento, las jugosas recompensas se perderán entre la verborrea oficial. Y finalmente, si así son de chichos, porqué hay tanto pinche crimen sin resolverse.
Evidentemente, el gobierno sabe que lo del 15 de septiembre nos dolió a todos, sabe que estamos hasta la madre de sus pendejadas y para pretender legitimarse, pretende vendernos este teatrito.
Nomás falta que estos tres tipos confiesen de una vez que ellos mataron a los 24 ejecutados de La Marquesa, a los 11 decapitados de Yucatán, al de Kapaz de la Sierra y a los 3 mil 500 muertos que van este año, producto de la narcoviolencia.

Si usted, apreciable lector de HECF, le gusta vestir como malandro, continuamente lo confunden con narco o de plano anda en esos pasos, no salga de su casa, no sea que pretendan implicarlo en algún caso como este. Hazme el chingado favor!

1 comentario:

Anónimo dijo...

ame lo de "Vestir como malandro...." y si bien es cierto que son viles mentiras... en cierto momento nos da seguridad... aunq sea falsa...